
El primero de ellos es el Logitech Wireless Drum Controller. La
ace un tiempo, pero ahora llega también al resto de consolas de última generación: la Xbox 360 y la Wii.
En ambas llega con licencia oficial, por lo que la conexión será muy sencilla. En la Xbox 3680 usa el protocolo de Microsoft, por lo que no necesitamos ningún cable, mientras que en la Wii lo conectaremos al Wiimote para poder controlar desde él las funciones y menús del juego.
La batería, como su nombre indica, es inalámbrica, y tiene un rango de hasta 10 metros, funcionando con un par de pilas de tipo AA. Además, puede plegarse para hacerla más fácil de guardar, aunque en la parte negativa encontramos su elevado precio, 230 dólares, poniéndose a la venta en septiembre en Europa.

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